Logotipos

Maru-Jasp viaja a Cheste con “Ruidos en la casa”

El próximo domingo 28 de octubre a las 19.00h, estaremos en el Teatro Liceo de Cheste dentro del la XVI Muestra de teatro no profesional.

Dirección Juanma Casero

Posiblemente una de las comedias mejor escritas de los últimos años. Acción, humor, ritmo, personajes trepidantes y situaciones inverosímiles que rodean una función de teatro con mucho misterio. Un vodevil inglés lleno de puertas, muebles y platos de sardinas que dejarán al espectador boquiabierto y sin respiración, atento para no perderse ni un detalle, porque parpadear un segundo puede suponer perderse unas risas.

Galeria de fotos: https://blog.maru-jasp.org/fotos/ruidos-en-la-casa/

 

 

 

 

TRES PREMIOS PARA ESTE MONTAJE Y PARA MARU-JASP:

– MEJOR ESCENOGRAFÍA

– MEJOR DIRECCIÓN

-MEJOR ESPECTÁCULO

 

 

El Grupo Maru Jasp obtiene tres galardones en la XVI Muestra de Teatro no Profesional de Cheste

 

Comunidad Valenciana

Tags: Cheste

Este fin de semana ha tenido lugar la Clausura y Entrega de Premios de la XVI Muestra de Teatro No Profesional de Cheste.

  • El grupo Maru Jasp se ha llevado tres de los galardones que entrega el Ayuntamiento de Cheste, concretamente el de Mejor Espectáculo, Mejor Dirección y Mejor Escenografía.
  • El grupo Plateatro de Cheste ha sido el encargado de dirigir y conducir esta entrega de premios con su espectáculo “Sonrisitis aguda”.
    El Ayuntamiento de Cheste hizo público ayer domingo el fallo del Jurado y entrega de Galardones a los premiados de la XVI Muestra de Teatro No Profesional de Cheste. En esta edición los galardones se han distribuido entre los grupos participantes, no obstante Maru Jasp se ha alzado con tres de ellos por su obra “Ruidos en la Casa”.

De manos de los compañeros de PlaTeatro y del Alcalde de Cheste, Maru Jasp subió al escenario hasta en 3 ocasiones para recoger el premio al Mejor Espectáculo, Mejor Dirección y Mejor Escenografía. El resto de galardones han recaído en el grupo La Farándula de San Ginés, en Rosana Esclapez por su interpretación de Agnes en “ Agnes de Dios” y en Rafael López  por su interpretación de    Andrew Wyke “La Huella”.

El acto ha estado presidido por el Alcalde de Cheste, David Doménech y la Vicepresidenta de Federación de Teatro Amateur de la Comunidad Valenciana, Engracia Arias. Ellos fueron los encargados junto a la Concejal de Cultura, Rosa Mª Cervera así como  a los distintos actores y miembros del  grupo chestano Plateatro de entregar los premios al mejor espectáculo, mejor escenografía, mejor interpretación masculina, mención especial del jurado, mejor dirección, o mejor espectáculo.

En esta edición Doménech se ha mostrado mucho más satisfecho y contento, “no solo por su organización sino por la excelente selección que se ha hecho de los grupos y las obras. El criterio tanto del público como del jurado ha sido dispar a la hora de decidir los premios lo que es símbolo del nivel que se ha dado y el público se ha volcado cada domingo con su asistencia”.

“Seguiremos apostando por la Muestra de Teatro pese a los tiempos de crisis porque apoyamos la cultura y porque sabemos que está fuertemente valorada a todos los niveles. Prueba de ello es que más de 70 compañías de toda España se presentaron para participar o que más de 2000 espectadores se han dirigido domingo tras domingo hasta este gran teatro Liceo que tiene Cheste” destacaba el Alcalde en su intervención.

Doménech puntualizó también el gran trabajo que hacen los grupos de teatro locales en esta muestra en la que participan sin opción a premio pero para la que traen “lo mejor de ellos mismos” y porque de forma totalmente desinteresada se brindan en todos los trabajos de organización de esta muestra de teatro en cada nueva edición y muy especialmente en esta.

PREMIO AL  MEJOR ESPECTÁCULO
“  Ruidos en la Casa “ por Asociación Cultural Maru – jasp
PREMIO DEL PÚBLICO
“  Un enemigo en el Pueblo “ por la Farándula de San Ginés
PREMIO MEJOR INTERPRETACIÓN MASCULINA
Rafael López  por su interpretación de    ANDREW WYKE     “ LA HUELLA”
PREMIO MEJOR INTERPRETACIÓN FEMENINA
Rosana Esclapez por su interpretación de Agnes en “ Agnes de Dios”
MEJOR DIRECCIÓN
Juanma Casero  por “ Ruidos en la Casa”

MEJOR ESCENOGRÁFÍA
“Ruidos en la Casa “

 

Regiduría

CAP. 1.-BREVE HISTORIA DE LA REGIDURÍA

Lo que se va a exponer en este apartado trata de como la figura del hoy Regidor llega a ser lo que hoy en día es, pero para esto no se puede omitir la figura del hoy Apuntador, Apuntador y Regidor, son dos profesiones estrechamente relacionadas, dos vidas paralelas.

Remontandonos al teatro griego, ya se encuentra la figura del Consueta (hoy llamado Apuntador, profesión tristemente destinada a su desaparición), pero no la del Regidor, que apareción mucho más tarde y que pasó por muchas fases hasta llegar a las competencias actuales.

El Consueta seguía sentado en un lugar estratégico, el curso de los ensayos y de las representaciones, interviniendo lo necesario ante los fallos de los actores, entonces las horas de ensayos no eran muchas y añadido a esto la larga duración de las obras, hacia que los actores llegasen a las representaciones con el texto no del todo memorizado y allí se encontraban entonces con el Consueta, que intentaba solucionar esos problemas que los actores puediesen tener con el texto.

El Consueta era el único técnico, ya que los artistas se preparaban absolutamente todo: vestuario, armas, máscaras, etc., todo cuanto fuera necesario. Lo que si existía era esa o esas personas que se dedicaban a bullir entre los actores, bailarines, cantantes, etc. que cuidaban de las primeras figuras, ayudándoles a vestirse, a prepararles para sus entradas a escena, incluso a hacerles algún recado que otro……y tal vez fueron ellos, los precursores de los actuales Regidores; ya en tiempos mucho más cercanos surgió la figura del Avisador, por nombrarlo de alguna manera, cuya misión era más o menos hacer todo lo que esas personas hacían bullendo entre los artistas, es decir servirles en aquello que pedían.

En tiempos más modernos (años treinta y cuarenta aproximadamente del siglo pasado), refiriéndonos al teatro en España, el Consueta pasó a llamarse Primer Apunte (posteriormente Apuntador) y el Avisador, después de una gran transformación en sus misiones, paso a llamarse Segundo Apunte o Traspunte (posteriormente Regidor),  y era lógico lo de primero y segundo, ya que el trabajo a realizar por el primero se consideraba mucho más importante que el trabajo a realizar por el segundo; aunque los cometidos del Segundo Apunte en esta época iban creciendo poco a poco, iba teniendo más trabajo y su categoría iba subiendo.

El Primer Apunte dado el gran número de obras teatrales que llevaban de repertorio muchas de las compañías de teatro del momento (entre teinta y cuarenta, lo cual hacia prácticamente imposible que los actores tuvieran en la memoriael texto completo de dicho repertorio), y el continuo cambio de cartel ( a veces una obra teatral distinta cada día de la semana), se convertía en el divo del escenario, desde su imprescindible presencia en la concha (desaparecida en los teatros modernos, sellada en los antiguos y mantenida en su sitio, no para su uso, sino como recuerdo de una época en algunos teatros antiguos remodelados). La concha era una trampilla situada en el centro del escenario en la zona de la corbata, entre el telón de boca y el público y que comunicaba con el foso; sobre el hueco para que no se viese al Primer Apunte se colocaba una especie de cajón de forma circular y se insonorizaba su interior con corcho.

La situación del Primer Apunte y su concha era lo más lejana que se pudiese a la posición que normalmente ocupaban los actores para que éstos tuviesen más espacio y facilitar así sus movimientos, lo cual no impedía que los apuntadores se tragasen todo el polvo que despedían los zapatos de los actores al pisar, las a veces muy gastadas y poco limpias alfombras usadas para la escena.

También era el Primer Apunte, pulsando un timbre, quien daba, desde la concha, la orden de levantar el telón, pero a la hora de levantarlo, dada su posición, sin vista de lo que ocurría detrás del telón, una vez preparada la escena, preparados los actores y apagada la luz de sala, el Segundo Apunte abandonaba la escena, el Primer Apunte, tras oír esa voz, calculaba que ya se había ido y arriba el telón, a dar letra y a tragar polvo.

A todo esto cabría añadir que era el Primer Apunte quien desde su posición y con dos timbres más, ejecutaba todos los sonidos de tiembres de puertas y teléfonos que sonaban durante la representación, aunque este es un cometido que tiempo después pasó a ser del Segundo Apunte. Señalar que en esta época, aún no se utilizaban fuentes de sonido (quizás algún tocadiscos), hasta la posterior llegada de los magnetofones.

El Segundo Apunte tenía como misión antes de cada una de las representaciones, dar los avisos, mediante timbres, si los había, y si no pegando voces, para que actores y técnicos supiesen el tiempo que faltaba para comenzar la representación; éstos avisos era La Primera, que se daba treinta minutos antes de comenzar, La Segunda, quince minutos antes, Los cinco minutos, este aviso siempre a viva voz y obviamente cinco minutos antes de comenzar; después era costumbre obligada preguntar al pirmer actor o a la primera acriz si daba su permiso para comenzar, recibido el visto bueno, se daba La Tercera y a comenzar, previo aviso al Primer Apunte, como se dijo antes, para que este diese el aviso de levantar el telón y a estar muy pendiente de los actores, prevenirles para sus entradas a escena, darles la orden para que entrasen y darles la primera frase con la que entraban a escena para que ligase con las siguientes frases, que ya se las daba el Primer Apunte.

Añadir que dado que los actores en aquella época (estamos aún hablando de los años cuarenta del siglo pasado), no estaban muy pendientes de sus incorporadciones del camerino a la escena, había que avisarlos siempre y entonces el Segundo Apunte se ponia de acuerdo con cada uno de ellos, para cómo iba a ser su aviso de incorporación al escenario (por tiembres, que sonaban en los camerinos o si no a voces, procurando que éstas no fueran muy altas); por ejemplo, un timbrazo de duración normal era para que subiese otro, un timbrazo largo para otro, dos timbrazos……etc, por supuesto a los actores y actrices principales había que irles a buscar a sus camerinos personalmente y avisarles de que les quedaba poco para entrar a escena (algo no muy complicado porque ocupaban siempre los camerinos más cercanos al escenario. También, en momentos concretos el Segundo Apunte daba letra (apuntaba), si la situación del actor era lejanda a la del Primer Apunte y la voz de éste no podía llegar hasta donde el actor se encontrase.